Cuando las prioridades de Dios se convierten en mías, él promete guiarme. Está en la Biblia, Proverbios 3:5-6, "Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas".
Si nuestras prioridades están correctas todo lo demás estará correcto. Está en la Biblia, Mateo 6:33, "Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas".