Dios usa a los demás para satisfacer nuestras necesidades. Está en la Biblia, II Reyes 6:6-7, "El varón de Dios preguntó: ¿Dónde cayó? Y él le mostró el lugar. Entonces cortó él un palo, y lo echó allí; e hizo flotar el hierro. Y dijo: Tómalo. Y él extendió la mano, y lo tomó".
Debemos estar dispuestos a satisfacer las necesidades de otros. Está en la Biblia, Mateo 23:11-12, "El que es el mayor de vosotros, sea vuestro siervo. Porque el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido".
Comprenda que satisfacer las necesidades de otros es servir a Dios. Está en la Biblia, Mateo 25:40, "Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis".
Debemos abrir nuestros ojos a los recursos que tenemos a mano, los cuales han sido provistos por Dios para satisfacer nuestras necesidades. Está en la Biblia, Rut 2:2-3, "Y Rut la moabita dijo a Noemí: Te ruego que me dejes ir al campo, y recogeré espigas en pos de aquel a cuyos ojos hallare gracia. Y ella le respondió: Ve, hija mía. Fue, pues, y llegando, espigó en el campo en pos de los segadores; y aconteció que aquella parte del campo era de Booz, el cual era de la familia de Elimelec".
Debemos reconocer nuestra dependencia de Dios para cada necesidad. Está en la Biblia, Salmo 104:27-28, "Todos ellos esperan en ti, para que les des su comida a su tiempo. Les das, recogen; abres tu mano, se sacian de bien".
Aun nuestras necesidades físicas son importantes para Jesús. Está en la Biblia, Marcos 8:1-3, "En aquellos días, como había una gran multitud, y no tenían qué comer, Jesús llamó a sus discípulos, y les dijo: Tengo compasión de la gente, porque ya hace tres días que están conmigo, y no tienen qué comer; y si los enviare en ayunas a sus casas, se desmayarán en el camino, pues algunos de ellos han venido de lejos".