Jesús enseñó la importancia del cuidado genuino. Está en la Biblia, Lucas 14:13-14, "Mas cuando hagas banquete, llama a los pobres, los mancos, los cojos y los ciegos; y serás bienaventurado; porque ellos no te pueden recompensar, pero te será recompensado en la resurrección de los justos".
Dios espera que cuidemos de los enfermos y de los que sufren. Está en la Biblia, Gálatas 4:14, "Y no me despreciasteis ni desechasteis por la prueba que tenía en mi cuerpo, antes bien me recibisteis como a un ángel de Dios, como a Cristo Jesús".