Jesús advirtió que en los últimos días aparecerían falsos Cristos, los cuales se disfrazarían como el Mesías y clamaría ser el salvador del mundo. Está en la Biblia, en Mateo 24:4 y 5 “Respondiendo Jesús les dijo: Mirad que nadie os engañe. Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán.”
En el Nuevo Testamento, la palabra del griego original para Cristo es “Christos”. La misma en el original hebreo en el Antiguo Testamento es “Mashiach”, la cual en español es traducida como Mesías. La traducción literal de ambos, griego y hebreo, es “el ungido”. Este es el título y la identidad con los cuales Jesús fue conocido durante su ministerio en Palestina. Está en la Biblia, Juan 4:25 y 26 dice “Le dijo la mujer: Sé que ha de venir el MESÍAS, llamado el Cristo; cuando él venga nos declarará todas las cosas. Jesús le dijo: Yo soy, el que habla contigo.”
Poco tiempo antes de su crucifixión, Jesús predicó su gran discurso profético referido a los profundos eventos que ocurrirían al final del tiempo justo antes de su Segunda Venida. Según lo registra Mateo 24:23-26, Jesús advirtió “Entonces, si alguno os dijere: Mirad, aquí está el Cristo, o mirad, allí está, no lo creáis. Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aún a los escogidos. Ya os lo he dicho antes. Así que si os dijeren: Mirad está en el desierto, no salgáis; o mirad, está en los aposentos, no lo creáis.”
Jesús enfatizó que los falsos Cristos realizarían grandes señales y milagros, y manifestaría terrible decepción. Muchos cristianos piensan que así como ellos creen en Jesucristo, serán guardados del engaño de los últimos días. Sin embargo, el engaño prolifera debido al hecho de que hay en realidad dos Jesucristos, no solamente uno. Algunas personas son engañadas a seguir al Jesús equivocado. Está en la Biblia, 2º Corintios 11:3 y 4 “Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo. Porque si viene alguno predicando a otro Jesús que el que os hemos predicado, o si recibís otro espíritu que el que habéis recibido, u otro evangelio que el que habéis aceptado, bien lo toleráis.” El apóstol Pablo aquí está hablando a los cristianos de la Iglesia primitiva. Él les advierte con respecto a falsos apóstoles quienes estaban predicando acerca de un Jesús que no es el Jesús real de la Biblia. Este otro Jesús es un Jesús ficticio, una fabricación de imaginaciones corruptas y pensamientos erróneos de los apóstoles espurios. El evangelio asociado con este otro Jesús es un evangelio diferente; no es el evangelio registrado en la Biblia y predicado por los verdaderos apóstoles. Además, este falso evangelio es acompañado por el aval de un espíritu, pero es un espíritu falsificado, no se trata del Santo Espíritu de la divina Trinidad.
¿A quién realmente están sirviendo los seguidores del otro Jesús? La respuesta se encuentra en 2º Corintios 11:13-15, “Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazaron como apóstoles de Cristo. Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.” El “otro Jesús” es un Jesús falsificado inventado por Satanás, un falso Jesús que hasta puede disfrazarse como un ángel de luz.
Justo antes del día de la Segunda Venida de Jesús, va a aparecer visiblemente sobre la tierra un gran Cristo falsificado. Está en la Biblia, 2º Tesalonicenses 2:3 y 4 “Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.” En esta profunda profecía de los eventos de los últimos días, la Biblia dice que va a haber una rebelión, una apostasía, un gran alejamiento de la fe. Junto con esta apostasía, va a haber una aparición del “hombre de pecado,” el “hombre de perdición,” el Anticristo. Este magnífico falso Cristo se sentará en el templo de Dios y falsificará el ministerio de Jesús.
¿Qué le sucederá a este falso Cristo, y como podremos reconocerlo? 2º Tesalonicenses 2:8-10 nos informa, “Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida; inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos.” Los seguidores del Mesías falsificado son engañados porque se rehúsan a amar la verdad de Dios como está revelada en su Santa Biblia.
Jesús enfatizó que no es suficiente con simplemente profesar el “nombre” del Señor para entrar en el reino de los cielos. Tiene que haber un “hacer” de la voluntad del Padre. Está en la Biblia, Mateo 7:21 “No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.” Jesús también declara en Juan 6:40, “Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.” Así tiene que haber un “ver al Hijo”, una contemplación del Jesús real, de su vida, y un “creer” en las palabras que habló. Jesús afirmó, en Juan 5:24, “De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.”
Trágicamente, los cristianos falsos serán en toda su sinceridad genuinos creyentes haciendo activamente la obra de Cristo. Incluso profetizarán en el nombre de Jesús, echarán fuera demonios en el nombre de Jesús, y harán milagros en Su nombre. Está en la Biblia, en Mateo 7:22 y 23, “Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.” Los seguidores del falso Cristo practican maldades. Quebrantan la ley de Dios, pasan por alto los mandamientos de Jesús. En cambio, Jesús declara en Juan 14:21, “El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él.”